No hagas ni un ruido, la puerta acabo de escuchar, mi padre ha llegado borracho de un bar, lo escucho enojado mi nombre gritar y contra una pared me trato de resguardar, trato de esconderme de su horrible mirada, no aguanto el llanto me siento espantada… Me encuentra llorando, me grita me insulta, me dice que sus problemas son por mí culpa, me empieza a golpear, me sigue golpeando, me logro soltar y corro, tropezando caigo al suelo, mis huesos doliendo papá me dice palabras que yo ya no entiendo, perdóname le grito, pero ya es muy tarde, su rostro desencajado parece que arde…
Sus golpes y sus palabras me duelen de verdad, tan sólo le pido a Dios misericordia y piedad… Por fin el termina y camina a la puerta mientras yo en el suelo quedo casi muerta… Mi nombre es Sarahí 13 años de edad, esta noche, mi padre me mató sin piedad.